"Do you think God would one day ask you to found a community of healing in Latin America?"
"Go and heal my crippled children, for I am the Healing Power within you..."As God began this work in Fr. Philip, he resisted the idea of starting a new community and made a visit to the Missionaries of Charity to see if God would want him to enter there. But when Father visited, he realized he was excaping God's call.
With the help of his spiritual director he discerned to leave the Seminary in Maryland and move to Tampa, FL with the idea of being ordained there to begin this new community God had in mind. About 9 years after Fr. Philip moved to Florida he was given permission by the Bishop to begin a new community. The community was founded on April 1, 1998 with the women's branch opening the following year on February 11, 1999, Our Lady of Lourdes.
After about 5 years of being in Tampa, God opened the doors for our community to move to Peru. Fr. Philip felt confirmed in the way God was opening the doors for this move through his spiritual director and through prayer hearing in his heart from the Father:"Return to your country of origin."We moved to Chaclacayo, Peru in January 10, 2003 in the Diocese of Chosica under Bishop Norbert Strottman. Finally in 2008 God opened the doors for us to go into what our Servant Mother heard in her heart as, "the heart of the world." We were invited to serve the Apostolic Vicariate of Puerto Maldonado by Mnsgr. Francisco Gonzalez Hernandez. In a place with record amonts of human trafficking, drugs, alcohol, cohabitation, prostitution are destroying families here in the"heart of the world" we see that God has called us precisely to the center where the healing of the family is needed most.
The community has now been assigned the pastoral ministry in the district of “Las Piedras” by Bishop David Martinez de Aguirre, O.P. We currently serve families in this district as well as in the Jail of San Francisco de Asis and the Hospital of Santa Rosa de Lima.
Nuestro fundador, el P. Philip Scott, comenzó su búsqueda del sacerdocio como seminarista en Mount St. Mary's en Maryland. Cuando era un joven seminarista, comenzó a experimentar movimientos en su corazón del deseo de Dios de que él fundara una nueva comunidad religiosa. Estos movimientos fueron confirmados más tarde por su director espiritual un día cuando, en ese momento, su director espiritual le preguntó a Felipe:
"¿Crees que Dios te pediría algún día que fundes una comunidad de sanación en América Latina?"
Durante este tiempo de seminario, cuando estos movimientos comenzaron a surgir en el Corazón del Padre, él fue en peregrinación a Lourdes. Fue allí donde el Padre escuchó a Jesus hablarle al corazón:
"Ve y sana a mis niños heridos, porque yo soy el Poder Sanadora dentro de ti ..."
Cuando Dios comenzó este trabajo en el P. Felipe, se resistió a la idea de comenzar una nueva comunidad e hizo una visita a las Misioneras de la Caridad para ver si Dios quería que él entrara allí. Pero cuando el Padre lo visitó, se dio cuenta de que estaba escuchando el llamado de Dios.
Con la ayuda de su director espiritual discernió dejar el Seminario en Maryland y mudarse a Tampa, FL con la idea de ser ordenado allí para comenzar esta nueva comunidad que Dios tenía en mente. Aproximadamente 9 años después de que el P. Philip se mudó a Florida y el obispo le dio permiso para comenzar una nueva comunidad. La comunidad fue fundada el 1 de abril de 1998 y la rama femenina se abrió al año siguiente el 11 de febrero de 1999, Nuestra Señora de Lourdes.
Después de aproximadamente 5 años de estar en Tampa, Dios abrió las puertas para que nuestra comunidad se mudara a Perú. P. Felipe se sintió confirmado en la forma en que Dios estaba abriendo las puertas para este movimiento a través de su director espiritual y a través de la oración que escuchó en su corazón del Padre:
"Regresa a tu país de origen".
Nos mudamos a Chaclacayo, Perú el 10 de enero de 2003 en la Diócesis de Chosica bajo el obispo Norbert Strottman. Finalmente en 2008 Dios nos abrió las puertas para entrar en lo que nuestra Madre Sierva escuchó en su corazón como, "el corazón del mundo". Fuimos invitados a servir en el Vicariato Apostólico de Puerto Maldonado por Mons. Francisco González Hernández. En un lugar con montos récord de trata de personas, drogas, alcohol, convivencia, prostitución están destrozando familias aquí en el "corazón del mundo" vemos que Dios nos ha llamado precisamente al centro donde más se necesita la sanación de la familia.
El obispo David Martinez de Aguirre, OP le ha asignado ahora a la comunidad el ministerio pastoral en el distrito de “Las Piedras”. Atendemos a familias en este distrito, así como en la Cárcel de San Francisco de Asis y el Hospital de Santa Rosa de Lima